Durante la Semana de Diseño de Tokio de 2015, una serie de exhibiciones simultáneas dieron vida al legado del diseñador Alexander Girard, a través de su trabajo y espíritu. En la tienda de Tokio de Herman Miller, se exhibieron artefactos de archivo junto con mobiliarios, textiles y productos contemporáneos, como parte de “Alexander Girard: An Uncommon Vision” (Una visión poco común). Mientras tanto, en la galería Curator’s Cube, la exhibición “Girard Continued” (la continuación de Girard) presentaba obras contemporáneas de Marshall Girard, el hijo de Alexander, y de sus hijos, Aleishall y Kori. Dada la ocasión, nos encontramos con Aleishall y Kori para analizar la popularidad perdurable de su abuelo, los detalles del trabajo estrecho con dicho legado, tal como Girard Studio, y sus propias iniciativas creativas.
Bienvenidos a Tokio. ¿Por qué creen que la obra de su abuelo ha tenido tanta popularidad recientemente?
Aleishall Girard Maxon: Hasta donde yo sé, Japón siempre ha sido receptivo a la obra de nuestro abuelo. Mi especulación es que hay familiaridad con el patrón, y una apreciación del patrón y el color en la vida cotidiana. Ya sea que se trate de una historia rica en arte popular y textiles, al parecer los japoneses no le temen al color y el patrón. También pienso que esta obra atrae a personas que pueden apreciar la simplicidad y la universalidad.
Kori Girard: Pienso que los japoneses tienen un enorme interés por otras culturas; en líneas generales, hay un gran conocimiento. Creo que eso se refleja bastante con el conocimiento que tenía nuestro abuelo acerca del mundo y su apreciación por la rigurosidad con la cual se expresan las diferentes culturas a sí mismas.
Más que en ningún otro lugar del mundo que he conocido, Japón tiene un profundo respeto por los gráficos, gráficos que son tanto sofisticados como extravagantes a la vez. Pienso que a las personas les resulta difícil seguir esa línea sutil, pero es realmente en lo que nuestro abuelo se destacaba.
Ustedes crecieron rodeados de muchos de los artículos que se presentan en nuestra exhibición o han sido expuestos a ellos por muchos años, ¿qué sienten al tenerlos todos reunidos en un contexto como éste?
AGM: En nuestras casas, en las casas de nuestros padres y abuelos, siempre hubo una combinación de las obras de nuestro abuelo y las de muchas otras personas, desde artesanos a diseñadores contemporáneos pero acá, en esta suerte de inmersión total, me resulta increíble ver lo bien que combina todo junto. Me resulta evidente ver que hay un hilo conductor en todo, y lo que se puede ver es cómo un objeto forma parte de otro. También es gratificante ver las nuevas piezas, y adoro la idea de que alguien las pueda incorporar a su vida.
Si se detienen a pensar, ¿qué es lo que más admiran de la obra de su abuelo?
KG: Para mí, una de las cosas más impresionantes es realmente la honestidad y la confianza en el trabajo. También pienso que la obra de nuestro abuelo es sumamente dinámica donde se desprende el ego, algo que es difícil de lograr. Al observar su trabajo, es evidente que amaba lo que hacía, y ¿qué mejor mensaje podrías tener que el de alguien inspirado absolutamente en lo que hace?
En su carácter oficial como Girard Studio, ustedes son responsables de supervisar y proteger el legado de su abuelo. Otra forma de verlo podría ser que ustedes están explorando y definiendo la relevancia contemporánea de su obra y su punto de vista sobre el diseño. ¿Cuál es su opinión sobre este rol?
KG: Creo que las palabras más adecuadas probablemente serían cuidadores, protectores y guardianes. La obra habla por sí sola, no tenemos que esforzarnos por hallar la relevancia. Diseñaba con una variedad tal, de los neutros más sutiles a los colores brillantes más audaces, o de texturas suaves a agresivas, que siempre hay algo allí con lo que se puede trabajar. Para nosotros, se trata más de encontrar los colaboradores correctos que estén interesados en los aspectos conceptuales y educativos del trabajo, no sólo en crear material sin sentido. Creo que simplemente “escuchamos” el trabajo e intentamos preguntarnos a nosotros mismos: “¿Qué hubiera hecho él?” O bien, “Si él estuviera vivo, ¿le interesaría esto?”. Ese es nuestro barómetro.
¿Pueden contarnos un poco acerca del proceso de trabajo?
AGM: Una de nuestras consideraciones es siempre comprender el proceso de las personas con las que podemos estar trabajando, comprender mejor el impacto medio ambiental y el potencial de crear algo que sea duradero y perdurable, porque ciertamente él tenía las mismas inquietudes. En el proceso, también consultamos a nuestros padres para tener en cuenta el contexto original en el que se hizo la obra, y si tiene sentido o no reintroducirla en forma de archivo o en algunos casos, cuando tiene sentido, llevarla hacia una aplicación levemente más contemporánea del trabajo. Tal como dijo Kori, no nos interesa para nada llenar de gráficos o patrones algo que podamos encontrar y vender cientos de artículos con la “temática”.
¿Qué significa para ustedes la autenticidad?
KG: Una gran parte de la autenticidad es asociarse con personas y empresas a quienes realmente les interese lo que hacen y cuenten la historia como corresponde. Indudablemente para nosotros, eso significa trabajar con Herman Miller. Herman Miller le brindó a nuestro abuelo tantas oportunidades y ventajas como para que pudiera hacer realidad el conjunto colectivo de obras que se ven aquí. Para mí, la autenticidad tiene mucho que ver con valorar y respetar el legado.
AGM: Estoy de acuerdo, y agregaría que nosotros pensamos en dos aspectos de la autenticidad. Uno es el técnico: garantizar que el producto sigue exactamente lo que se produjo originalmente, a menos que haya mejoras que puedan hacerse con procesos y materiales modernos que no alteren ni comprometan la integridad del diseño. El segundo es el espíritu, y respetar el espíritu en el que se creó originalmente la obra. Por supuesto, no podemos hablar por nuestro abuelo sobre cada idea que se presenta, si él hubiera hecho algo o no, pero creo que estamos bastante familiarizados con la forma en que llevaba su vida y lo que pensaba sobre estas cosas.
Para seguir con eso, ¿pueden identificar rasgos de su espíritu que según ustedes hayan pasado a su padre y través de ellos a ustedes?
AGM: Uno de los rasgos principales es una suerte de libertad para explorar una idea, algo que yo amo. Nunca nada detuvo a nuestro abuelo cuando tenía una chispa creativa, ya sea que tuviera que meterse en una madriguera para encontrar una solución, determinar qué herramienta era la mejor, qué era necesario ensamblar, quién podría ayudarlo con el oficio o lo que fuera. Nuestro padre es muy parecido. En nuestra infancia, era una locura cuando teníamos un proyecto escolar o una idea para un disfraz de Halloween o algo por el estilo. Sin importar que él tuviera idea o no, el engranaje empezaba a funcionar; íbamos al taller y lo resolvíamos o encontrábamos la manera de hacerlo. Yo creo que eso es bastante único y grandioso, porque amplía los límites de aquello con lo que te sientes cómodo intentando, sin hacer un juicio sobre el fracaso en el logro; tiene que ver más con el proceso en sí.
KG: Estoy de acuerdo. Para mí, el espíritu de la curiosidad y experimentación sin límites, y de recordarse a sí mismo que no se trata de una pieza ni de una idea en particular que existe en un vacío, sino más bien de un estilo de vida o la forma de interactuar con lo que nos rodea, es lo que crea el trabajo de una vida.
Siento que es como volver a dibujar. Se trata de regresar a cuando éramos pequeños; siempre nos alentaban a dibujar en cada rato que tuviéramos libre. Cuando el dibujo es una actividad, es realmente una manera de extraer ideas, y de conceptualizar lo que hay en tu cabeza.
Es injusto formular esa pregunta sin preguntarles también qué creen que heredaron de su abuela y de su madre.
AGM: Eso es interesante porque hay muchas similitudes entre nuestra madre y nuestra abuela, que no era su madre sino su suegra. Parecieran aportar el lado práctico, sería el peso y el contrapeso con una creatividad más libre, cuando estás demasiado inmerso en el trabajo, hay algo que te regresa a la realidad.
Cuéntennos un poco acerca de la exhibición en Curator’s Cube, “Girard Continued”
AGM: Bueno, Kori, nuestro padre y yo siempre estamos creando nuestras propias obras en diferentes capacidades, y muchas veces pueden estar inspiradas o influenciadas por una de las obras del otro. Con frecuencia hablamos sobre lo que estamos trabajando o creando o pensando en crear, por lo que hacer una muestra juntos en Japón fue una oportunidad en verdad maravillosa: Todos hicimos obras nuevas para esta exposición.
En lo personal, estoy intentando llevar mi trabajo a otro nivel usando los mismos materiales que he estado usando desde hace bastante tiempo mientras que, a la vez, exploro nuevas capacidades con esos materiales.
KG: Para mí, ha sido algo trascendental poder trabajar con nuestro padre, quien prácticamente nunca había podido hacer una presentación en el contexto de exhibición de arte. Es realmente un enorme privilegio y honor hacer algo así, y la respuesta ha sido increíblemente cálida.
“Kori, nuestro padre y yo estamos siempre creando nuestras propias obras en diferentes capacidades, y muchas veces pueden estar inspiradas o influenciadas por una de las obras del otro”.
- Aleishall Girard Maxon
¿Cómo abordan el proceso creativo?
KG: Trabajo constantemente en lo que eso significa. Mi proceso ha sido multifacético durante mucho tiempo, creando tanto como fuera posible, experimentando con tantos medios como fuera posible, colaborando con otros artistas para aprender y explorar. Más recientemente, como Aleishall y yo asumimos mayor responsabilidad por el legado de nuestro abuelo, nos dimos cuenta de que una de las cosas más importantes de nuestro trabajo consiste en alinearnos con los socios correctos, personas en las que podemos confiar implícitamente. Eso nos da la libertad de enfocarnos nuevamente a nosotros mismos y a nuestro propio trabajo, y de seguir avanzando.
AGM: Y sólo para terminar, a menudo nos preguntan sobre hacer nuestro propio trabajo y trabajar con la obra de nuestro abuelo. Yo creo que ambos tenemos claro que si él aún estuviera aquí, no querría que comprometiéramos nuestra propia energía creativa y nuestros deseos a centrarnos únicamente en el pasado y en lo que él hizo.
Dicho eso, en lo personal, es muy inspirador dedicar tanto tiempo a observar y clasificar toda la obra de nuestro abuelo. Soy consciente de que eso ejerce una influencia en mí. No miro directamente a una pieza textil y luego voy y creo un collar o una pieza en base a esa combinación de colores en sí, sino que se trata de una fuente de inspiración constante.
¿Qué esperan que se vayan pensando quienes asistan a estas exhibiciones?
AGM: Espero que se sientan inspirados en sus propias vidas; inspirados a vivir con más color y más textura. Independientemente de que vean el hilo conductor de la obra, estoy segura de que lo asimilarán en algún nivel.
KG: Considero que la obra promueve la curiosidad y la intriga, y tal vez propone que las personas se interesen más en ellas mismas y en lo que las estimula. ¿Qué mejor manera de vivir que sintiéndose interesado en las cosas que nos rodean?