Desarrollar continuidad

Casi 40 años después de la primera colaboración, la relación de Herman Miller con el arquitecto Sir Nicholas Grimshaw sigue vigente.


Escrito por: Clark Malcolm

Ilustración de: Ben Anders

Vista exterior parcial de la instalación PortalMill de Herman Miller en el Reino Unido.

Max De Pree necesitaba un arquitecto. Herman Miller necesitaba instalaciones de fabricación y distribución en el Reino Unido desde donde prestar servicio a sus mercados internacionales y en 1975, como presidente de la junta de directores, De Pree debía encargarse de todo eso. Este es el comienzo de una larga historia que recientemente agregó un nuevo capítulo con la entrega de las instalaciones de fabricación y distribución de PortalMill de Herman Miller en Melksham, el 17 de noviembre de 2015.

De Pree eventualmente escogió como arquitecto a sir Nicholas Grimshaw, de Farrell Grimshaw Partners. La firma obtuvo la calificación más elevada que podía otorgar Max: 105 de una puntuación posible de 105. Entre sus trece calificaciones están la "sensibilidad con el medio ambiente", "concientización de las relaciones humanas y actitudes de Herman Miller" y "enfoque a la resolución de problemas". (Para ver la versión completa de este proyecto, consulte El informe Bath).

De Pree y Grimshaw congeniaron de inmediato, en gran parte debido a las capacidades y la personalidad de un joven arquitecto estadounidense, Jeff Scherer, que estaba viviendo con Grimshaw en el momento del intercambio por su ayuda en la renovación de una casa lujosa en Londres. El informe sobre el edificio de Bath, la "Declaración de expectativas" de Max inspiró a Grimshaw y a su equipo. "El proyecto captó nuestra imaginación", dice Grimshaw. La mayoría de los dibujos fueron realizados por Grimshaw y Scherer. Tanto el edificio innovador de Bath (fabricación) y el edificio posterior en Chippenham (distribución) fueron galardonados, impresionaron a la gente de Herman Miller, se convirtieron en puntos de referencia en el Reino Unido y funcionaron bien durante décadas, exhibiendo el punto de vista del diseño de Herman Miller y un proceso de resolución de problemas centrado en las personas, además de las opiniones igualitarias de la empresa sobre el valor innato de cada persona, independientemente de su categoría de trabajo. "Max y yo coincidíamos en nuestras posturas", dice Grimshaw. "Ambos estábamos interesados en desarrollar una democracia industrial".

Spreads from Statement of Expectations, published in 1976.

Fragmentos de Declaraciones de expectativas, publicado en 1976, acompañan las fotografías de Grimshaw con cada una de las expectativas de Max, ilustrando la ejecución del informe.

Ahora avanzamos casi 40 años hasta 2012. Andy Lock, presidente de Herman Miller International, necesitaba un arquitecto. Los cambios en los mercados y la tecnología de fabricación exigían una nueva instalación en el Reino Unido. El transporte hacia y desde la antigua instalación de Bath resultaba complicado y la fabricación y distribución resultarían más eficaces si se combinaban bajo un mismo techo. Lock y su equipo deseaban obtener un mejor acceso al transporte; querían conservar tantos empleados como fuera posible; tenían un presupuesto limitado, pero querían que su nuevo edificio expresara los valores de larga trayectoria de Herman Miller sobre las personas, el diseño y el valor inherente de los individuos.

El problema era encontrar el terreno. "Resulta difícil encontrar un terreno disponible en la ubicación adecuada", dice Stephen Perkins, vicepresidente de Investigación Internacional, Diseño y Desarrollo y miembro del equipo de proyecto. "Finalmente, en Melksham, encontramos una antigua pista de atletismo. Era perfecta. Luego descubrimos a los tritones".

Exterior view of PortalMill.

PortalMill, situado en Melksham, Reino Unido, abrió sus puertas en 2015.

En el Reino Unido todo tiene un pasado y en palabras de W.S. Gilbert (de la prestigiosa empresa Gilbert y Sullivan), "las cosas rara vez son lo que parecen". El sitio ubicado perfectamente resultó ser una base abandonada de la Fuerza Aérea británica durante la Segunda Guerra Mundial y el hogar de una colonia de tritones crestados, una especie protegida. Después de algunas quejas, el equipo dio la bienvenida a los tritones como nuevos vecinos y comenzó a buscar una manera de custodiarlos una vez finalizado el edificio. El primer paso fue rodearlos y asegurarnos de que no se vieran dañados durante la construcción, un proceso demandante que implicó la división del sitio y la construcción de una especie de cerco para los tritones.

Y el retraso resultó positivo, si bien nadie lo sabía en ese momento.

Mientras tanto, en la oficina de Grimshaw, una pareja de jóvenes arquitectos debía encargarse de detallar todo eso en un informe, con el título "Edificios reconvertidos", que documentaba proyectos que tenían más de 20 años de antigüedad y que registraba su estado. El proyecto de Herman Miller de 1975 fue uno de esos edificios. Grimshaw vio las imágenes de los edificios de Bath y Chippenham y sintió intriga. ¿Cómo se sostenían? ¿Cómo le iba a Herman Miller después de todos estos años? Quería verlos en persona.

Exterior view of BlueBuilding.

Inaugurado en 1983, el monumento histórico BlueBuilding situado en Chippenham, Reino Unido, había sido útil para Herman Miller durante décadas.

Casualmente, el 4 de abril de 2012, Grimshaw visitó sus primeros trabajos y los comienzos de su conexión con Herman Miller. Lock y Perkins almorzaron con él y concluyeron que el famoso arquitecto "era absolutamente encantador, humilde y sencillo". Pero Lock no podía permitirse arruinar la ocasión comentándole a Grimshaw que los edificios en Bath y Chippenham iban a ponerse en venta. "Premeditadamente evitamos el asunto" recuerda Lock.

Ese podría haber sido el final de esta historia, pero Lock estuvo intranquilo durante la noche y decidió que llamaría a Grimshaw durante la mañana y le confesaría la verdad. Después de escuchar la historia de los planes de traslado de Herman Miller y de enterarse de la reticencia del equipo respecto del enfoque de Grimshaw con un presupuesto tan limitado (y al haberse hecho eco de los planes de Herman Miller provenientes de sus jóvenes colegas), Grimshaw insistió en llevar a cabo el proyecto. "Somos los arquitectos elegidos por Herman Miller", dijo. "Deberíamos poder incorporar todo lo que queremos hacer". Lock y su equipo deseaban poder terminar con el edificio que Grimshaw deseaba diseñar, que el presupuesto les permitiría y que Herman Miller deseaba lograr.

Exterior view of PortaMill.

La nueva instalación de PortalMill combina la fabricación y la distribución bajo un mismo techo sin dejar de expresar los valores de Herman Miller.

Cuarenta y tres meses después del afortunado almuerzo de Lock y Perkins con Grimshaw, esto podría considerarse un éxito en todo sentido.

El 17 de noviembre de 2015, el nuevo edificio PortalMill de Herman Miller abrió sus puertas donde antiguamente se emplazaba una pista de atletismo de la Fuerza Aérea británica, solo que ahora era cohabitado por una empresa estadounidense y una colonia de tritones británicos. El nuevo edificio está diseñado para crear una comunidad y "honrar y respetar a las personas y el trabajo que se realiza allí", dice Perkins. La calle y el café son compartidos por todos en el edificio y el sentido de pertenencia es palpable. "Cuando recorrimos el lugar que estaba en construcción, pudimos notar que algo especial sucedía allí, este es nuestro lugar, todos pertenecemos a este lugar", dice Neil Banbury, quien trabaja como maquinista de madera en PortalMill. "El entorno de trabajo es increíble, es tan liviano que es como trabajar al aire libre", dice Bruce Harper, supervisor del almacén. El edificio es "increíblemente eficaz", dice Grimshaw. "Todo es estrepitoso aquí".

Portrait of Sir Nicholas Grimshaw in PortaMill.

“Max y yo coincidíamos en nuestras posturas, ambos estábamos interesados en desarrollar una democracia industrial.”

-Sir Grimshaw

Interior view of PortaMill.

Vista interior de la entrada de PortalMill.

“El entorno de trabajo es increíble, es tan liviano que es como trabajar al aire libre.”

- Bruce Harper

Interior view of PortaMill's factory floor.

Vista interior del piso de la fábrica de PortalMill.

"Con la ayuda de muchos equipos, Nick descubrió una manera de hacerla funcionar", dice Lock. Pero la explicación real para esta notable cadena de eventos se basa en lo que Lock denomina "la continuidad de las relaciones humanas".

"Nuestra relación con Herman Miller ha sido de mutuo aprendizaje", dice Grimshaw. Lo que comenzó hace casi 40 años fue un vínculo entre un arquitecto británico y un ejecutivo de negocios estadounidense. Ambos somos abiertos, curiosos y responsables acerca de su trabajo conjunto, deseosos de aprender uno del otro y de aventurarnos en territorio desconocido para crear algo memorable. Pero como escribió Max más tarde en Leadership Is an Art, "Un edificio es como la reputación. Una vez que lo creas, dura toda la vida". El entusiasmo compartido por el potencial de diseño para resolver problemas y mejorar el trabajo y la vida humana fue sembrado en Somerset en 1975, ha crecido y se ha fortalecido durante cuarenta años a ambos lados del Atlántico y volvió a florecer en el otoño de 2015 en Wiltshire. 

Exterior view of PortaMill.