Se ajusta y atenúa para brindar la cantidad de luz precisa en el lugar exacto donde el usuario lo desee. Consume apenas algo más de seis vatios y se apaga automáticamente luego de nueve horas de uso para ahorrar energía. Capitaliza los últimos avances en la tecnología LED para generar una iluminación atractiva que hace que todos se vean mejor.
Teniendo en cuenta todo lo que el usuario obtiene, Tone brilla como uno de los mejores valores en el mercado LED.
Todo tipo de movimientos
Tone se mueve hacia todos lados. La lámpara completa gira sobre la base, mientras que las articulaciones, en la base, la parte superior y la sección media, le dan el control preciso sobre lo que está iluminado.
También se encuentra disponible una versión con un solo brazo. Permanece fija a una altura ergonómica adecuada, pero si ofrece todas las características de su contraparte articulada.
Un valor que brilla
Capacidad de ajuste sencillo, atenuación y apagado automático: Tone ofrece un gran valor en un paquete pequeño. Dado que solo consume algo más de seis vatios, alrededor del 10 % de una lámpara incandescente común, el valor también se refleja en los mínimos costos operativos.
Las lámparas LED de Tone duran más de 50.000 horas; a un promedio de ocho horas por día, su vida útil es de 24 años. Incluso entonces, la placa del circuito impreso LED puede ser reemplazada para dar una nueva vida a Tone. Cuando finalmente esté lista para ser retirada, podrá reciclarse en un 93 % (para comenzar, está hecha con un 38 % de material reciclado).
Menor espacio ocupado
Dado que los espacios de trabajo son cada vez más pequeños, las lámparas de trabajo voluminosas pueden convertirse en un obstáculo. Cuando se la ubica en una superficie de trabajo, Tone tiene una base de apenas 15 cm de diámetro, un diseño compacto que ilumina su trabajo sin desordenar su escritorio.
Tanto la versión articulada como la versión de un solo brazo pueden sujetarse a la superficie de trabajo o montarse sobre un riel de pared.
Nacida y criada en Michigan
Tone se fabrica en Michigan, el estado de origen de Herman Miller. Eso se aplica a todos los componentes principales, incluso a la placa del circuito impreso. Tone necesita poca energía para funcionar y no requiere demasiado para el traslado de piezas durante el proceso de fabricación. En cada paso de su vida, Tone se desplaza gentilmente en el entorno.