Más luz, menos energía
Tom Newhouse diseñó esta lámpara para que fuera flexible, versátil, compatible y económica. Y debido a su tecnología LED, 24 años de vida útil, el costo por usarla durante todo el año es menor que el de una taza de café, Flute deja un impacto de carbono minúsculo en el planeta. Esta luz de trabajo también deja un mínimo espacio ocupado sobre su escritorio, ya que pesa menos de 1 kg. Y es de cosecha propia: se fabrica en los EE. UU.
Eficacia y larga duración
Flute le permite ahorrar dinero de varias maneras diferentes. Utiliza lo más novedoso en tecnología LED para proporcionar resultados lumínicos de alta calidad, a la vez que consume entre un 30 y un 50 % menos de energía que las luces de trabajo tradicionales, ya que genera 48 lúmenes por vatio de energía consumida.
Los chips de LED de Flute no requieren reemplazo de bombillas ni mantenimiento durante su vida útil estimada: 24 años con un uso promedio. Por ese motivo, permite ahorrar mucho por el bajo costo de mantenimiento.
Más luz sobre cualquier objeto
Flute proporciona 226 lúmenes de luz. Traducción: Eso es muchísima luz. Justo lo que se necesita para una luz de trabajo. Luz medianamente cálida, apropiada para la vista.
La lámpara independiente tiene un cabezal que gira 230 grados de izquierda a derecha. De esta manera, puede dirigir la luz hacia donde la necesite. La opción de montaje con abrazadera giratoria a 360 grados proporciona la máxima flexibilidad en el emplazamiento de la luz.
Ágil
Fácil de usar desde todo punto de vista, incluido lo que pesa: menos de un kilo para el modelo independiente y 680 gramos para la opción de montaje con abrazadera. Tóquela para encenderla o apagarla. Y gracias a su disipador de calor integrado, la temperatura de Flute no se eleva. Puede levantarla y moverla sin quemarse.
Tres opciones de color: gris plata, grafito y blanco.